The China Mail - Entre balas, la angustiante cotidianidad de periodistas mexicanos

USD -
AED 3.67298
AFN 70.823013
ALL 86.775569
AMD 388.915041
ANG 1.80229
AOA 916.00029
ARS 1165.000022
AUD 1.56485
AWG 1.8025
AZN 1.725034
BAM 1.720875
BBD 2.018575
BDT 121.46782
BGN 1.719448
BHD 0.376902
BIF 2973.52826
BMD 1
BND 1.306209
BOB 6.908081
BRL 5.613981
BSD 0.99974
BTN 84.489457
BWP 13.685938
BYN 3.271726
BYR 19600
BZD 2.008192
CAD 1.38313
CDF 2878.000221
CHF 0.82535
CLF 0.024716
CLP 948.450004
CNY 7.269496
CNH 7.26963
COP 4197
CRC 504.973625
CUC 1
CUP 26.5
CVE 97.016862
CZK 21.912971
DJF 178.02982
DKK 6.56345
DOP 58.838798
DZD 132.52396
EGP 50.785603
ERN 15
ETB 134.165658
EUR 0.879195
FJD 2.261003
FKP 0.7464
GBP 0.748875
GEL 2.744945
GGP 0.7464
GHS 14.246433
GIP 0.7464
GMD 71.500564
GNF 8658.621888
GTQ 7.69911
GYD 209.794148
HKD 7.75648
HNL 25.944257
HRK 6.623697
HTG 130.612101
HUF 355.279662
IDR 16618.75
ILS 3.62579
IMP 0.7464
INR 84.542499
IQD 1309.640606
IRR 42100.000025
ISK 128.279933
JEP 0.7464
JMD 158.264519
JOD 0.709299
JPY 143.034015
KES 129.430095
KGS 87.44998
KHR 4001.777395
KMF 432.250385
KPW 899.962286
KRW 1422.97993
KWD 0.30643
KYD 0.833176
KZT 513.046807
LAK 21614.701341
LBP 89576.724931
LKR 299.271004
LRD 199.948086
LSL 18.615568
LTL 2.95274
LVL 0.60489
LYD 5.457033
MAD 9.266636
MDL 17.160656
MGA 4439.086842
MKD 54.126919
MMK 2099.391763
MNT 3573.279231
MOP 7.987805
MRU 39.562664
MUR 45.160016
MVR 15.39428
MWK 1733.575599
MXN 19.522097
MYR 4.314974
MZN 64.009766
NAD 18.615896
NGN 1602.520288
NIO 36.788547
NOK 10.383565
NPR 135.187646
NZD 1.689835
OMR 0.385001
PAB 0.99974
PEN 3.665568
PGK 4.08192
PHP 55.868503
PKR 280.902072
PLN 3.759073
PYG 8007.144837
QAR 3.643899
RON 4.376897
RSD 103.124079
RUB 81.242148
RWF 1436.169979
SAR 3.750752
SBD 8.361298
SCR 14.215028
SDG 600.497601
SEK 9.64629
SGD 1.30636
SHP 0.785843
SLE 22.750038
SLL 20969.483762
SOS 571.317956
SRD 36.850118
STD 20697.981008
SVC 8.747487
SYP 13001.4097
SZL 18.59929
THB 33.419936
TJS 10.537222
TMT 3.51
TND 2.969282
TOP 2.342098
TRY 38.474995
TTD 6.771697
TWD 32.034304
TZS 2695.000166
UAH 41.472624
UGX 3662.201104
UYU 42.065716
UZS 12930.219053
VES 86.54811
VND 26005
VUV 120.409409
WST 2.768399
XAF 577.175439
XAG 0.031024
XAU 0.000305
XCD 2.70255
XDR 0.71673
XOF 577.165282
XPF 104.934823
YER 245.049905
ZAR 18.56175
ZMK 9001.20839
ZMW 27.817984
ZWL 321.999592
Entre balas, la angustiante cotidianidad de periodistas mexicanos
Entre balas, la angustiante cotidianidad de periodistas mexicanos

Entre balas, la angustiante cotidianidad de periodistas mexicanos

Es lunes y María está lista para reportear en Aguascalientes, México, pero amenazada de muerte esta periodista debe cumplir un ritual antes de salir de casa: pedir a las autoridades que monitoreen sus pasos y entregar el itinerario a sus escoltas.

Tamaño del texto:

Simultáneamente los fotógrafos Jesús Aguilar en Tijuana, Lenin Ocampo en Chilpancingo, Martín Patiño en Guadalajara y la reportera María Teresa Montaño en Toluca vuelven a las calles para cubrir la violencia del crimen organizado y rastrear la corrupción.

Todos viven con el miedo a cuestas, constató la AFP tras acompañarlos durante una jornada de trabajo. Esta realidad se agudiza por el asesinato de ocho periodistas desde enero pasado, frente a siete en todo 2021.

La estela de sangre no para de crecer en México, uno de los países más peligrosos para la prensa con unos 150 homicidios de reporteros desde 2000. El más reciente ocurrió el martes en Michoacán (oeste), donde fue baleado Armando Linares.

"Sé que mi vida está en riesgo todos los días y es terrible vivir con la amenaza, con el miedo de que salgas y ya no regreses", dice María Martínez, de 55 años, en su pequeña casa de Aguascalientes protegida por varias cerraduras y cámaras de seguridad.

Directora del medio digital Péndulo Informativo, ha denunciado amenazas por sus investigaciones sobre corrupción y nexos de funcionarios con narcotraficantes.

Varios policías fueron encarcelados tras sus publicaciones.

"¡Te vas a morir, perra!", advertía una de las amenazas recibidas en su teléfono y por las cuales fue incluida en un programa gubernamental que da protección a medio millar de comunicadores.

- A merced del crimen -

En Tijuana, el temor de Jesús Aguilar se intensificó el 17 de enero cuando fue asesinado el fotógrafo Margarito Martínez, con quien trabajaba a diario en esa ciudad. Ahí también, días después, caía bajo las balas Lourdes Maldonado pese a estar en el programa de protección.

La saga trágica de 2022 la completan José Luis Gamboa, Roberto Toledo (compañero de Linares), Heber López, Juan Carlos Muñiz y Jorge Luis Camero.

Cubrir ajustes de cuentas de narcotraficantes y denunciar la corrupción o sus vínculos con políticos y fuerzas de seguridad deja a estos reporteros a merced de sicarios.

"Cuando viene un carro atrás de mí despacio siento que se va a parar y me van a disparar. O cuando estoy estacionado y miro un vehículo más cerca de mí, muevo el asiento para atrás y me acuesto para resguardarme", confiesa Aguilar, de 32 años.

En Toluca, la reportera independiente María Teresa Montaño (53 años) trabaja también con escoltas, luego de ser secuestrada unas horas en 2021 tras revelar un entramado de corrupción.

"Mi vida privada está limitada (...), ha sido muy difícil. Hay que tener mucho cuidado" con los desplazamientos, relata.

Desde 2006, cuando fue desplegada una ofensiva antidrogas, México acumula unos 340.000 asesinatos, la mayoría atribuidos a acciones de criminales.

- Impotencia -

Martínez pide a autoridades federales que la llamen cada dos horas por medio de un geolocalizador, que también funciona como botón de pánico. Pero ella confía más en sus guardias armados.

"¡Les debo mi vida! ¡Sin ellos ya no estaría viva!", dice, señalando a dos militares de las fuerzas especiales en retiro que la acompañan en un auto.

Vestidos de civil, ambos hombres están atentos a cualquier vehículo o persona que se acerque, y cuando la periodista camina no se alejan más de dos metros.

En Chilpancingo (sur), el fotógrafo Lenin Ocampo (40 años) cuenta que a menudo se topa con miembros del cártel Jalisco Nueva Generación o de La Familia Michoacana. "Nos paran, nos revisan. La amenaza siempre está latente".

Durante la noche, al lado de un automóvil incendiado por desconocidos en Guadalajara (oeste), su colega Martín Patiño (41 años) declara su "impotencia" por la impunidad en los crímenes de periodistas, que según Reporteros Sin Fronteras llega a 92%. "Las autoridades no hacen nada".

Desde su creación en 2010, la fiscalía especializada en delitos contra la libertad de expresión logró 28 sentencias, de casi 1.500 denuncias por homicidio, agresiones y amenazas a periodistas. No todos los casos entran en su competencia.

El presidente de México, el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, promete "cero impunidad", y destaca que hay 17 detenidos por cuatro de las muertes.

"No hay en ninguno de estos asesinatos elementos para señalar como responsables a funcionarios públicos (...). Son crímenes que han cometido bandas de delincuentes", aseguró este miércoles al lamentar el homicidio de Linares, quien había denunciado amenazas por "exhibir a funcionarios y políticos corruptos".

Enfrentado a un sector de la prensa tradicional al que acusa de servir a intereses privados, el mandatario rechaza como "injerencistas" recientes llamados de Estados Unidos y del Parlamento Europeo a proteger a los reporteros.

- Precariedad laboral -

Los fotógrafos entrevistados carecen de equipo de seguridad, y como muchos periodistas del interior del país, colaboran con varios medios.

La mayoría de quienes cubren crónica roja "dependen de la cantidad de notas o fotos que venden para pagar la renta, por lo que priorizan la producción sobre la seguridad", explica Jan-Albert Hootsen, del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ).

Un comunicador del estado de Guerrero dijo a la AFP que hay periódicos que pagan apenas 3,8 dólares por fotografía.

Además, al no ser muchos, quienes cubren la violencia "son altamente reconocibles, aumentando su nivel de inseguridad", observa Hootsen.

Días antes de su cita con la AFP, María Martínez sufrió un preinfarto que atribuye al estrés por su situación y que -asegura- ya le provocó un accidente cerebrovascular.

La comunicadora, que descarta renunciar al oficio que la apasiona, concluye la jornada con una entrevista a la exesposa de un narcotraficante para su primer libro.

"Mi familia me ha pedido que deje el periodismo, pero soy una mujer con convicciones, de valor (...), tengo una responsabilidad social", justifica.

Z.Huang--ThChM