Más de 300 surcoreanos arrestados según Seúl en gran redada migratoria en EEUU
Más de 300 surcoreanos se encontraban entre las 475 personas arrestadas en una redada migratoria en una fábrica de baterías de Hyundai y LG Energy Solution en el sureste de Estados Unidos, informó el sábado el gobierno de Corea del Sur.
El gobierno del presidente estadounidense Donald Trump dijo que el allanamiento de la planta ubicada en Ellabell, en el estado de Georgia, fue la mayor redada en un solo sitio en el marco de la cruzada antiinmigratoria del mandatario.
Imágenes de la redada publicadas por las autoridades estadounidenses mostraron a trabajadores detenidos, esposados y con cadenas alrededor de los tobillos subiendo a un autobús de transporte de reclusos.
Desde Seúl, el ministro de Asuntos Exteriores Cho Hyun dijo el sábado en una reunión de emergencia que de los 475 detenidos "se cree que más de 300 son nuestros ciudadanos".
"Estamos profundamente preocupados y sentimos una gran responsabilidad por este asunto", declaró, y expresó su disposición a viajar a Washington para reunirse con las autoridades si fuera necesario.
El primer viceministro de Relaciones Exteriores, Park Yoon-joo, planteó a su vez el tema en una conversación telefónica con la subsecretaria de Estado de Estados Unidos para Asuntos Políticos, Allison Hooker, y expresó su pesar por la represión y la publicación de imágenes del arresto de los trabajadores coreanos.
"Las actividades económicas de las empresas coreanas que invierten en Estados Unidos y los derechos e intereses de los ciudadanos coreanos no deben verse infringidos injustamente durante las operaciones policiales estadounidenses", dijo Park según un comunicado de su ministerio.
Park "solicitó al Departamento de Estado trabajar activamente para asegurar una resolución justa y rápida de este asunto", agregó.
- Trump respalda a ICE -
Trump respaldó la labor del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). "Diría que eran extranjeros ilegales y que el ICE solo estaba haciendo su trabajo", dijo al ser consultado por periodistas el viernes.
El mismo día, Steven Schrank, agente especial del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) en Atlanta, señaló en rueda de prensa que la operación realizada el jueves fue consecuencia de una "investigación penal sobre denuncias de prácticas laborales ilegales y graves delitos federales".
Los 475 detenidos estaban "presentes ilegalmente en Estados Unidos" y "trabajando de forma ilegal" y fueron puestos a disposición del ICE para su posible expulsión, afirmó.
La redada del jueves tuvo lugar en una usina de baterías para vehículos eléctricos.
LG Energy Solution indicó el sábado que del total de detenidos, unos 47 (46 surcoreanos y un indonesio) eran empleados directos de la empresa, en tanto alrededor de 250 eran empleados de subcontratistas.
Hyundai dijo el viernes no tener conocimiento de que alguno de los detenidos estuviera "empleado directamente" por la empresa.
Según el gobierno de Trump, algunos de los arrestados habían cruzado ilegalmente la frontera de Estados Unidos, otros habían llegado con visas que les prohibían trabajar o habían excedido la duración de sus visas de trabajo.
"Esta operación subraya nuestro compromiso de proteger empleos para los georgianos y los estadounidenses, asegurar una competencia justa para las empresas que cumplen con la ley, salvaguardar la integridad de nuestra economía y proteger a los trabajadores de la explotación", subrayó Schrank.
Corea del Sur, la cuarta mayor economía de Asia, es un fabricante clave de automóviles y productor de productos electrónicos, con múltiples plantas en Estados Unidos.
En julio, Seúl se comprometió a invertir 350.000 millones de dólares en territorio estadounidense tras las amenazas arancelarias de Trump, quien busca revivir el sector manufacturero en Estados Unidos.
El mandatario republicano inició un segundo mandato en enero con la promesa de implementar el programa de expulsión de inmigrantes más grande en la historia de su país.
Desde entonces, su gobierno ha aplicado con la mayor firmeza medidas contra los aproximadamente 11 millones de personas en situación migratoria irregular presentes en Estados Unidos.
U.Chen--ThChM