

Ataques rusos dejan 25 muertos en Ucrania tras el ultimátum de Trump
Ataques rusos contra Ucrania mataron el martes al menos a 25 civiles, incluida una mujer embarazada y una quincena de presos, un día después del nuevo ultimátum de Donald Trump a Vladimir Putin.
Las autoridades precisaron que más de 70 personas también resultaron heridas. Los bombardeos se produjeron un día después de que el presidente estadounidense diera a su homólogo ruso "10 o 12 días", en lugar de 50, para poner fin a su invasión de Ucrania, bajo amenaza de sanciones.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, denunció en redes sociales el bombardeo del centro penitenciario en la región de Zaporiyia, en el sur del país, calificándolo de "ataque deliberado, intencionado".
Aseguró que "los rusos no podían ignorar que estaban atacando a civiles en este establecimiento".
A través de su portavoz Dmitri Peskov, el Kremlin desmintió que se ataquen "objetivos civiles", asegurando que el ejército ruso solo realiza ataques "contra infraestructuras militares o vinculadas al ejército".
Las imágenes publicadas por el Ministerio de Justicia ucraniano muestran escombros y ladrillos esparcidos por el suelo alrededor de un edificio en la colonia penitenciaria de Bilenkivska, cuyas ventanas quedaron destruidas.
El ministerio precisó que no hay riesgo de fuga de los detenidos ya que el perímetro del centro no ha sido dañado.
Nadiïa, una habitante de Bilenke, tuvo su casa dañada por el ataque. "A las seis menos diez, un vecino me llamó y me dijo: 'Ven rápido, tu techo ha desaparecido'. Ni una sola ventana está intacta", explicó la mujer de 74 años.
Los periodistas de AFP en el lugar constataron edificios en ruinas, ladrillos esparcidos por el suelo y en habitaciones con techos destrozados.
El jefe de la administración regional, Iván Fiódorov, indicó que Rusia llevó a cabo ocho ataques aéreos en la región de Zaporiyia, uno de los cuales impactó en la prisión, donde murieron 16 personas y 43 resultaron heridas.
- "Violación del derecho humanitario" -
Este ataque ocurre exactamente tres años después de un bombardeo contra la prisión de Olenivka, en la región ucraniana de Donetsk, en el este, bajo ocupación rusa, que causó la muerte de numerosos prisioneros ucranianos. Kiev y Moscú se culparon mutuamente.
"El régimen de Putin, que también profiere amenazas contra Estados Unidos a través de algunos de sus portavoces, debe enfrentarse a medidas económicas y militares que le privan de la capacidad de hacer la guerra", afirmó el jefe de la administración presidencial ucraniana, Andrii Yermak, en X.
Un alto cargo ucraniano dijo a AFP que en la prisión había 274 detenidos, todos ucranianos, y que en el momento del ataque trabajaban 30 empleados. No había prisioneros de guerra rusos.
La Misión de Monitoreo de Derechos Humanos de la ONU en Ucrania recordó en un comunicado que las prisiones no son infraestructuras militares y que los prisioneros son civiles que "deben ser protegidos por el derecho humanitario internacional".
El mediador ucraniano para los derechos humanos, Dmitro Lubinets, denunció en la red X una "violación flagrante del derecho humanitario internacional" y una "nueva prueba de los crímenes de guerra cometidos por Rusia".
- El Kremlin "toma nota" -
La fuerza aérea ucraniana informó que Rusia lanzó dos misiles y 37 drones o drones señuelo en la madrugada del martes, de los cuales 32 fueron derribados
En la región de Járkov (noreste) los ataques rusos causaron seis muertos y otros tres en la de Dniprópetrovsk (centro), entre ellos una mujer embarazada. En la misma zona un hospital resultó dañado, según las autoridades locales.
En este contexto en que las fuerzas ucranianas carecen de efectivos para combatir a los rusos, Zelenski promulgó el martes una ley que autoriza el reclutamiento de personas mayores de 60 años.
En Rusia, una persona murió en la región de Rostov a causa de un ataque con drones ucranianos, anunció el gobernador regional, Yuri Sliusar.
A pesar de estos nuevos ataques, el Kremlin aseguró el martes que mantiene su "compromiso con un proceso de paz", señalando asimismo haber "tomado nota" del ultimátum de Trump.
Peskov afirmó, no obstante, que Rusia tiene la intención de continuar "preservando sus intereses". Moscú exige que Kiev le ceda cuatro regiones, además de Crimea, anexionada en 2014, y renuncie a integrarse en la OTAN.
Las últimas negociaciones directas entre rusos y ucranianos en Estambul (Turquía) la semana pasada duraron menos de una hora y, como en ocasiones anteriores, solo concluyeron con un acuerdo para intercambiar prisioneros y cuerpos de soldados fallecidos.
El Kremlin también lamentó la "ralentización" en la normalización de las relaciones entre Washington y Moscú, aunque mostró interés en una mejor "dinámica" en este proceso.
H.Au--ThChM