

Termina el verano y resurgen los casos judiciales del entorno de Pedro Sánchez
La decisión formal de enviar a juicio al fiscal general, conocida este martes, y la comparecencia de su esposa ante un juez el miércoles, representan para el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez el regreso con fuerza de los casos judiciales que llevan meses amargándole la vida.
Álvaro García Ortiz, el representante más alto de la fiscalía española, cuyo nombramiento fue propuesto por Sánchez y su Gobierno, será juzgado próximamente por violación del secreto judicial, anunció este martes el Tribunal Supremo.
El más alto representante de la fiscalía en España está acusado de divulgar a la prensa información sobre el empresario Alberto González Amador, acusado de fraude fiscal y compañero sentimental de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la región de Madrid y figura del conservador Partido Popular (PP), primer partido de la oposición nacional.
Su próximo juicio, cuya fecha aún no se anunció, se daba por hecho desde que a finales de julio se desestimó el recurso que interpuso contra la decisión de juzgarle.
En su auto de este martes, el juez Ángel Luis Hurtado excluyó suspender a García Ortiz como fiscal general, pero le impuso el pago de una fianza de 150.000 euros (176.000 dólares), en un caso que no tiene precedentes en la historia judicial española.
El presidente del Gobierno, que llegó al poder en 2018 con la promesa de sanear la vida política tras un enorme escándalo de corrupción en el PP, se encuentra desde hace meses debilitado por múltiples asuntos judiciales.
Su esposa Begoña Gómez, también investigada por otros asuntos, está citada el miércoles a las 12H00 horas (10H00 GMT) para ser interrogada por usar presuntamente para fines particulares a una ayudante contratada oficialmente para trabajar para Moncloa.
A lo largo del otoño, se espera que se produzcan novedades en otros casos, como el de su hermano David, sospechoso de haber utilizado la influencia de Sánchez para conseguir empleo.
También en el del exnúmero tres del Partido Socialista (PSOE) Santos Cerdán, en prisión preventiva desde junio, por presuntamente cobrar sobornos para conceder obras públicas, un asunto que implica también a otro antiguo estrecho colaborador de Sánchez, el exministro José Luis Ábalos.
- "Un daño inmenso" -
Todos estos casos proporcionan munición día tras día a la oposición, con el PP a la cabeza, que reclama constantemente la dimisión de Pedro Sánchez, sometido además al desgaste de no contar con mayoría en el Congreso.
"La degradación institucional a la que Pedro Sánchez somete a nuestro país es insoportable. Si el PSOE no exige la dimisión de Álvaro García Ortiz le acompañará hasta el banquillo", criticó el martes en X Alberto Núñez Feijóo, líder del PP.
"Procesado su fiscal y su hermano, teniendo en prisión a su número dos en el partido, e imputados su mujer y su ex mano derecha, es evidente que la limpieza de este país pasa por cambiar al presidente del Gobierno", añadió Núñez Feijóo.
Pedro Sánchez, por su parte, siempre ha defendido la probidad de su mujer y de su Gobierno e insistido en las rápidas medidas tomadas, por ejemplo, cuando se revelaron las conversaciones comprometedoras para Santos Cerdán, rápidamente apartado del Partido Socialista.
Pero en una rara entrevista televisiva emitida el 1 de septiembre, también arremetió contra algunos jueces, refiriéndose en particular a las investigaciones contra su esposa y su hermano, abiertas en ambos casos tras denuncias de asociaciones presentadas como cercanas a la extrema derecha.
"Que hay jueces haciendo política y que hay políticos que tratan de hacer justicia, sin duda alguna", dijo el jefe de Gobierno socialista. "Afortunadamente, es la minoría, pero la hay y hacen un daño terrible, un inmenso daño a la justicia".
N.Lo--ThChM