The China Mail - Científicos traban carrera contra el tiempo ante la devastación de la Amazonía

USD -
AED 3.672983
AFN 69.500471
ALL 84.401218
AMD 383.679913
ANG 1.789699
AOA 916.999814
ARS 1331.347202
AUD 1.537302
AWG 1.8025
AZN 1.696907
BAM 1.684894
BBD 2.018979
BDT 121.693509
BGN 1.677875
BHD 0.377046
BIF 2948.5
BMD 1
BND 1.286457
BOB 6.924982
BRL 5.462102
BSD 0.999927
BTN 87.794309
BWP 13.488635
BYN 3.291393
BYR 19600
BZD 2.008606
CAD 1.37424
CDF 2890.00019
CHF 0.80631
CLF 0.02485
CLP 974.849833
CNY 7.18315
CNH 7.185645
COP 4048
CRC 506.308394
CUC 1
CUP 26.5
CVE 95.250331
CZK 21.074031
DJF 177.719763
DKK 6.401205
DOP 60.999876
DZD 130.333089
EGP 48.445502
ERN 15
ETB 138.174986
EUR 0.85782
FJD 2.2564
FKP 0.751467
GBP 0.74888
GEL 2.693685
GGP 0.751467
GHS 10.550117
GIP 0.751467
GMD 72.500572
GNF 8674.999892
GTQ 7.673256
GYD 209.215871
HKD 7.84935
HNL 26.350275
HRK 6.4631
HTG 131.221544
HUF 341.559874
IDR 16354.1
ILS 3.4298
IMP 0.751467
INR 87.7121
IQD 1310
IRR 42124.999932
ISK 122.479752
JEP 0.751467
JMD 159.805649
JOD 0.708996
JPY 147.427973
KES 129.504164
KGS 87.449914
KHR 4009.999759
KMF 422.517366
KPW 899.94784
KRW 1384.769735
KWD 0.30548
KYD 0.833337
KZT 537.310733
LAK 21600.000093
LBP 89549.999641
LKR 300.839518
LRD 201.000134
LSL 17.769736
LTL 2.95274
LVL 0.60489
LYD 5.435058
MAD 9.061964
MDL 16.984635
MGA 4434.99991
MKD 53.007232
MMK 2099.311056
MNT 3591.43546
MOP 8.085189
MRU 39.897294
MUR 45.640083
MVR 15.392268
MWK 1736.500989
MXN 18.609499
MYR 4.230076
MZN 63.959738
NAD 17.769753
NGN 1530.100369
NIO 36.750216
NOK 10.17677
NPR 140.468735
NZD 1.68607
OMR 0.38451
PAB 0.999978
PEN 3.556504
PGK 4.140502
PHP 57.156496
PKR 282.550292
PLN 3.66595
PYG 7489.759085
QAR 3.640503
RON 4.353198
RSD 100.470941
RUB 80.000429
RWF 1441.5
SAR 3.752478
SBD 8.217066
SCR 14.635841
SDG 600.514208
SEK 9.60338
SGD 1.28489
SHP 0.785843
SLE 23.097406
SLL 20969.503947
SOS 571.485453
SRD 37.036022
STD 20697.981008
STN 21.25
SVC 8.749252
SYP 13001.372255
SZL 17.770267
THB 32.369873
TJS 9.350099
TMT 3.51
TND 2.880503
TOP 2.342098
TRY 40.6519
TTD 6.779208
TWD 29.918026
TZS 2480.000181
UAH 41.60133
UGX 3569.997889
UYU 40.128017
UZS 12524.999717
VES 128.74775
VND 26225
VUV 119.124121
WST 2.771506
XAF 565.126968
XAG 0.026428
XAU 0.000297
XCD 2.70255
XCG 1.802143
XDR 0.704914
XOF 565.503684
XPF 102.67499
YER 240.449555
ZAR 17.80672
ZMK 9001.198524
ZMW 23.025264
ZWL 321.999592
Científicos traban carrera contra el tiempo ante la devastación de la Amazonía
Científicos traban carrera contra el tiempo ante la devastación de la Amazonía / Foto: © AFP

Científicos traban carrera contra el tiempo ante la devastación de la Amazonía

En una selva remota y todavía preservada de la Amazonía brasileña, una expedición científica lleva días catalongando la biodiversidad y buscando nuevas especies. El tiempo apremia.

Tamaño del texto:

"El ritmo de devastación es mayor que el ritmo de conocimiento", dice Francisco Farroñay, del Instituto de Investigaciones de la Amazonia de Brasil (Inpa) antes de hacer una incisión en la corteza de un enorme árbol y oler su interior.

Los temores de este joven botánico peruano se fundan en dos realidades encontradas: mientras la mayor selva del planeta está siendo asolada a marcha forzada por la deforestación e incendios provocados para el agronegocio, minería y tráfico ilegal de madera, su infinita biodiversidad sigue siendo un gran misterio para la ciencia.

"Es una lucha contra el tiempo", sostiene.

Para llegar a este paraje al sur del estado de Amazonas, considerado el más conservado de los nueve de la Amazonía Legal, se puede tomar una avioneta desde Manaos, sobrevolar cientos de kilómetros de manto verde con serpenteantes ríos hasta Manicoré, un municipio de casi 50.000 km2, y recorrer en lancha durante cinco horas las aguas negras del río homónimo, entre exuberantes selvas inundadas, los igapós.

Aquí recaló a principios de junio una expedición, organizada por Greenpeace, con una quincena de científicos como Farroñay para inventariar la fauna y la flora y secundar una vieja demanda de las comunidades tradicionales que viven a orillas del río: constituirse en Región de Desarrollo Sostenible (RDS), una categoría de unidad de conservación que sirva para cohibir los crecientes crímenes ambientales en su entorno.

Durante varias semanas, especialistas en mamíferos, aves, anfibios, reptiles y peces se adentraron en la selva para colectar muestras de plantas y detallar el comportamiento de animales, para lo cual instalaron cámaras y micrófonos.

- "Nunca lo vamos a conocer"

Irónicamente, en el papel de periódico que una botánica del grupo usa para prensar una flor puede leerse este titular: "Aumento en la explotación de madera en el (estado) Amazonas", sobre una foto de dos camiones saliendo de la selva cargados con enormes troncos.

"La mayoría de las especies de plantas de la Amazonía se distribuyen en áreas reducidas. Si desconocemos el 60% de las especies de árboles, cualquier región que es deforestada está eliminando una parte de la biodiversidad que nunca vamos a conocer", reclama Alberto Vicentini, investigador del INPA.

Según un estudio de Mapbiomas divulgado en septiembre del año pasado, la Amazonía perdió entre 1985 y 2020 unos 74,6 millones de hectáreas de vegetación original, un área equivalente a todo el territorio de Chile.

El fenómeno se agravó durante el gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro, al que los ambientalistas acusan de fomentar la deforestación de esta selva vital para frenar el cambio climático, con sus políticas y la retórica a favor de la agroindustria, de hacer la vista gorda ante los infractores y de cortar los recursos de las agencias de control ambiental.

Desde que asumió en 2019, la deforestación anual promedio en la Amazonía brasileña aumentó un 75% respecto de la década anterior, según cifras oficiales.

"Ademas, vivimos un momento de negación de la ciencia, como vimos con la pandemia en Brasil, un oscurantismo tremendo. Las instituciones de fomento a la investigación en Brasil están siendo atacadas por las políticas de este gobierno, las universidades están sufriendo muchos recortes", agrega Vicentini.

- "Andando hacia atrás" -

En otro punto del río Manicoré, en cuyas aguas se reflejan las copas de los árboles inundados en esta época del año, una canoa se adentra lentamente en un 'igarapé', un brazo de agua cristalina que discurre por dentro de la floresta cerrada.

De ella saltan tres biólogos especialistas en peces, que se sumergen con pequeñas redes para estudiar si los peces de esas aguas son distintos a los del río principal.

"Hay lugares donde nunca fue nadie, no se tiene idea de lo que hay. Sin recursos para investigar, no tenemos la información necesaria para explicar por qué tenemos que preservar", explica Lucía Rapp Py-Daniel, doctora en Ecología y Biologia Evolutiva.

La investigación viene perdiendo recursos desde hace una década.

En mayo, las dos principales sociedades científicas de Brasil, la Academia Brasileña de las Ciencias (ABC) y la Sociedad Brasileña para el Progreso de la Ciencia (SBPC) advirtieron de que este año habrá un recorte de casi 3.000 millones de reales (unos USD 560 millones al tipo de cambio actual) en investigación científica.

"Deberíamos acelerar el ritmo de investigación para llegar a tiempo antes de la destrucción, pero estamos andando hacía atrás", lamenta Py-Daniel.

R.Yeung--ThChM