The China Mail - Empresas huyen de India en 2025

USD -
AED 3.672503
AFN 66.489639
ALL 83.872087
AMD 382.480133
ANG 1.789982
AOA 917.0003
ARS 1450.699702
AUD 1.544736
AWG 1.8025
AZN 1.699041
BAM 1.69722
BBD 2.01352
BDT 122.007836
BGN 1.695875
BHD 0.37699
BIF 2949.338748
BMD 1
BND 1.304378
BOB 6.907594
BRL 5.352801
BSD 0.999679
BTN 88.558647
BWP 13.450775
BYN 3.407125
BYR 19600
BZD 2.010578
CAD 1.41299
CDF 2221.00033
CHF 0.80818
CLF 0.024039
CLP 943.050062
CNY 7.12675
CNH 7.12449
COP 3825.88
CRC 502.442792
CUC 1
CUP 26.5
CVE 95.686244
CZK 21.11385
DJF 178.017286
DKK 6.47882
DOP 64.320178
DZD 130.66705
EGP 47.347006
ERN 15
ETB 153.49263
EUR 0.86768
FJD 2.28525
FKP 0.766404
GBP 0.76411
GEL 2.715017
GGP 0.766404
GHS 10.92632
GIP 0.766404
GMD 73.508006
GNF 8677.881382
GTQ 7.6608
GYD 209.15339
HKD 7.775025
HNL 26.286056
HRK 6.539803
HTG 130.827172
HUF 334.998987
IDR 16711
ILS 3.271502
IMP 0.766404
INR 88.66825
IQD 1309.660176
IRR 42112.501218
ISK 126.68026
JEP 0.766404
JMD 160.35857
JOD 0.708975
JPY 153.312971
KES 129.150268
KGS 87.449913
KHR 4012.669762
KMF 428.000238
KPW 900.033283
KRW 1447.954975
KWD 0.307089
KYD 0.833167
KZT 526.13127
LAK 21717.265947
LBP 89523.367365
LKR 304.861328
LRD 182.946302
LSL 17.373217
LTL 2.952741
LVL 0.60489
LYD 5.466197
MAD 9.311066
MDL 17.114592
MGA 4508.159378
MKD 53.394772
MMK 2099.044592
MNT 3585.031206
MOP 8.005051
MRU 39.997917
MUR 45.999832
MVR 15.404961
MWK 1733.486063
MXN 18.63575
MYR 4.183006
MZN 63.960152
NAD 17.373217
NGN 1436.9102
NIO 36.78522
NOK 10.225185
NPR 141.693568
NZD 1.77489
OMR 0.384498
PAB 0.999779
PEN 3.375927
PGK 4.279045
PHP 58.997504
PKR 282.679805
PLN 3.691414
PYG 7081.988268
QAR 3.643566
RON 4.413096
RSD 101.707004
RUB 81.145785
RWF 1452.596867
SAR 3.750613
SBD 8.223823
SCR 13.740107
SDG 600.497654
SEK 9.586485
SGD 1.305415
SHP 0.750259
SLE 23.196085
SLL 20969.499529
SOS 571.349231
SRD 38.503502
STD 20697.981008
STN 21.260533
SVC 8.747304
SYP 11056.895466
SZL 17.359159
THB 32.414498
TJS 9.227278
TMT 3.5
TND 2.959939
TOP 2.342104
TRY 42.117398
TTD 6.773954
TWD 30.971303
TZS 2459.806999
UAH 42.066455
UGX 3491.096532
UYU 39.813947
UZS 11966.746503
VES 227.27225
VND 26315
VUV 122.169446
WST 2.82328
XAF 569.234174
XAG 0.0208
XAU 0.000251
XCD 2.70255
XCG 1.801686
XDR 0.70875
XOF 569.231704
XPF 103.489719
YER 238.491627
ZAR 17.38063
ZMK 9001.224357
ZMW 22.61803
ZWL 321.999592

Empresas huyen de India en 2025




En los últimos meses, India, que alguna vez fue vista como el próximo gran destino para las inversiones globales, está enfrentando un fenómeno inesperado: grandes empresas multinacionales están reconsiderando su presencia en el país. Este cambio, que ha generado preocupación en los círculos económicos, está impulsado por una combinación de desafíos estructurales, políticas gubernamentales y una economía que muestra señales de desaceleración en 2025.

India ha sido durante años un imán para las empresas extranjeras, atraídas por su enorme mercado de consumo, con más de 1.400 millones de habitantes, y una fuerza laboral joven y abundante. Sin embargo, en 2025, el panorama económico ha cambiado. La economía india, que proyectaba un crecimiento del PIB superior al 6% este año, enfrenta dificultades para mantener el ritmo necesario para competir con otras potencias globales. Factores como una desaceleración en el consumo, el desempleo persistente y una infraestructura aún insuficiente están frenando el impulso del país.

Uno de los principales obstáculos para las empresas es el entorno regulatorio. A pesar de las reformas implementadas en la última década, como la introducción del impuesto sobre bienes y servicios (GST) y la liberalización de ciertos sectores, las políticas gubernamentales siguen siendo percibidas como inconsistentes. Las regulaciones complejas y una burocracia arraigada dificultan la operación de negocios, especialmente para las multinacionales que buscan eficiencia y rapidez. Además, el proteccionismo económico, con aranceles elevados y restricciones a la inversión extranjera, ha generado frustración entre los inversores.

El mercado bursátil indio, que alguna vez fue un símbolo de dinamismo, también está sufriendo. Desde mediados de 2024, los principales índices han registrado pérdidas consecutivas, marcando la peor racha desde 1996. La rupia india, por su parte, continúa depreciándose frente al dólar, lo que encarece las operaciones para las empresas extranjeras. Este contexto financiero inestable ha llevado a varias compañías a replantear sus estrategias en el país.

Otro factor clave es la dificultad para aprovechar plenamente la ventaja demográfica de India. Aunque el país cuenta con una población joven y una clase media en expansión, el desempleo y la subocupación afectan a millones de graduados universitarios. Muchos profesionales altamente calificados terminan en empleos que no corresponden a su formación, lo que limita la productividad y la innovación. Las empresas extranjeras, que esperaban encontrar una fuerza laboral competitiva a bajo costo, se enfrentan a la realidad de un mercado laboral desequilibrado, donde más del 44% de los trabajadores siguen dedicados a la agricultura, mientras que los sectores de servicios e industria no logran absorber suficiente mano de obra.

En este contexto, algunas multinacionales han comenzado a buscar alternativas. Países como Vietnam y México están emergiendo como destinos atractivos para la relocalización de cadenas de suministro, especialmente en sectores como la tecnología, la automoción y la manufactura aeroespacial. Estos países ofrecen entornos regulatorios más predecibles y costos operativos competitivos, lo que los convierte en opciones viables para las empresas que buscan diversificar su presencia fuera de China, un movimiento que India esperaba capitalizar.

A pesar de estos desafíos, no todo es sombrío. India sigue siendo un mercado con un potencial inmenso. Sectores como las energías renovables, la tecnología y la salud continúan atrayendo inversiones, y el país ha logrado avances significativos en digitalización, con más del 40% de las transacciones globales por internet provenientes de consumidores indios. Sin embargo, para recuperar la confianza de las grandes empresas, el gobierno deberá implementar reformas más audaces, enfocadas en simplificar regulaciones, mejorar la infraestructura y fomentar un entorno más abierto al comercio global.

El éxodo de empresas de India en 2025 no significa el fin de su ascenso económico, pero sí es una advertencia clara. El país enfrenta una encrucijada: o acelera las reformas necesarias para convertirse en un verdadero centro de manufactura y servicios globales, o corre el riesgo de perder terreno frente a otros mercados emergentes. La próxima década será crucial para determinar si India puede cumplir con las expectativas que alguna vez generó.