The China Mail - En Estados Unidos, voluntarios crían ostras para limpiar los mares

USD -
AED 3.67305
AFN 68.773892
ALL 85.1919
AMD 383.844121
ANG 1.789699
AOA 917.000464
ARS 1319.936745
AUD 1.551747
AWG 1.8025
AZN 1.702909
BAM 1.708921
BBD 2.018218
BDT 122.195767
BGN 1.709301
BHD 0.377034
BIF 2979.706852
BMD 1
BND 1.297101
BOB 6.907097
BRL 5.583097
BSD 0.999672
BTN 87.54407
BWP 13.649927
BYN 3.271194
BYR 19600
BZD 2.00782
CAD 1.383805
CDF 2889.999756
CHF 0.812105
CLF 0.02487
CLP 975.649832
CNY 7.1769
CNH 7.20375
COP 4180.25
CRC 505.122436
CUC 1
CUP 26.5
CVE 96.345486
CZK 21.465015
DJF 178.003014
DKK 6.52004
DOP 60.892549
DZD 130.832878
EGP 48.650799
ERN 15
ETB 138.526224
EUR 0.873705
FJD 2.26815
FKP 0.753407
GBP 0.75573
GEL 2.649932
GGP 0.753407
GHS 10.495642
GIP 0.753407
GMD 71.999594
GNF 8671.224797
GTQ 7.676882
GYD 209.126455
HKD 7.85002
HNL 26.261823
HRK 6.582797
HTG 131.169313
HUF 349.488983
IDR 16497
ILS 3.38599
IMP 0.753407
INR 87.607651
IQD 1309.42135
IRR 42112.531123
ISK 124.210267
JEP 0.753407
JMD 159.943729
JOD 0.708974
JPY 149.852501
KES 128.939595
KGS 87.450423
KHR 4004.456192
KMF 431.496346
KPW 899.943686
KRW 1394.6201
KWD 0.30597
KYD 0.832958
KZT 539.837043
LAK 21585.443107
LBP 89567.793093
LKR 302.068634
LRD 200.415037
LSL 18.132856
LTL 2.95274
LVL 0.60489
LYD 5.461019
MAD 9.136766
MDL 17.212259
MGA 4526.09275
MKD 53.788855
MMK 2099.176207
MNT 3589.345014
MOP 8.082308
MRU 39.91175
MUR 46.750419
MVR 15.396166
MWK 1733.28382
MXN 18.82255
MYR 4.265023
MZN 63.960351
NAD 18.132856
NGN 1532.679903
NIO 36.785747
NOK 10.287025
NPR 140.070338
NZD 1.692778
OMR 0.384495
PAB 0.999585
PEN 3.56705
PGK 4.146006
PHP 58.340994
PKR 283.754123
PLN 3.732297
PYG 7486.402062
QAR 3.644585
RON 4.4335
RSD 102.334058
RUB 80.125349
RWF 1445.378886
SAR 3.751071
SBD 8.244163
SCR 14.684374
SDG 600.528417
SEK 9.747285
SGD 1.296765
SHP 0.785843
SLE 23.000101
SLL 20969.503947
SOS 571.266301
SRD 36.670248
STD 20697.981008
STN 21.407195
SVC 8.746368
SYP 13001.531245
SZL 18.127963
THB 32.6645
TJS 9.425981
TMT 3.51
TND 2.967063
TOP 2.342103
TRY 40.59448
TTD 6.786518
TWD 29.926504
TZS 2572.506573
UAH 41.696586
UGX 3583.302388
UYU 40.0886
UZS 12586.557155
VES 123.721575
VND 26199
VUV 119.302744
WST 2.758516
XAF 573.151008
XAG 0.027349
XAU 0.000303
XCD 2.70255
XCG 1.80154
XDR 0.69341
XOF 573.151008
XPF 104.204985
YER 240.649974
ZAR 18.11785
ZMK 9001.199399
ZMW 22.965115
ZWL 321.999592
En Estados Unidos, voluntarios crían ostras para limpiar los mares
En Estados Unidos, voluntarios crían ostras para limpiar los mares / Foto: © AFP

En Estados Unidos, voluntarios crían ostras para limpiar los mares

Apreciada por los cocineros, la ostra podría ser también uno de los soldados que el mundo necesita para luchar contra la degradación del medio ambiente. Kimberly Price está convencida de ello y junto con otros voluntarios intenta aumentar las poblaciones de estos limpiadores de los mares.

Tamaño del texto:

Esta habitante de Maryland, en el este de Estados Unidos, cría miles de ostras en su casa situada a orillas del agua. Cuando están lo suficientemente maduros, los moluscos son liberados en la bahía de Chesapeake, cerca de Washington, donde limpian el agua.

Las ostras son filtros naturales extremadamente eficaces: cada una puede procesar hasta 190 litros de agua por día.

Con ellas, el hábitat se vuelve más sano, y la flora y la fauna marina mejoran, lo que según los expertos también puede ayudar a que las aguas capturen más dióxido de carbono responsable del calentamiento global.

Hoy en día, solo queda el 1% de las ostras nativas de la bahía de Chesapeake que se encontraban por miles de millones antes de la década de 1880, suficiente para filtrar toda el agua de la bahía, según los historiadores. Fueron víctimas de la contaminación, la sobrepesca y las enfermedades.

Los ambientalistas se enfrentan a un desafío colosal y los voluntarios como Kimberly Price desempeñan un papel crucial en la repoblación de la bahía.

Durante nueve meses, las ostras jóvenes se crían en jaulas colgadas con cuerdas del muelle privado de Price, consultora inmobiliaria de 53 años, para darles mejores posibilidades de crecer. Luego, los moluscos se ponen a trabajar para ayudar a preservar el planeta.

"Nosotros los humanos destruimos todo, ¿verdad? Así que vemos cómo hacer para rectificar la situación", explica Kimberly Price a la AFP mientras águilas pescadoras planean sobre su cabeza.

En la jaula con la inscripción "Prohibida la venta y el consumo humano", viejas conchas de ostras sirven de lecho a media docena de pequeños moluscos del tamaño de una uña.

- "Dirección positiva" -

Al llegar a casa de Price el verano pasado, no eran mucho más grandes que cabezas de alfiler, venidos de una incubadora especializada.

Durante la visita de la AFP a finales de mayo, Kimberly Price lavaba las jóvenes ostras antes de entregarlas a la Fundación de la Bahía de Chesapeake (CBF), que las introduce en arrecifes santuario donde la pesca de moluscos está prohibida.

En 2018, la organización sin fines de lucro y sus socios se fijaron como objetivo implantar 10.000 millones de nuevas ostras en la bahía -el mayor estuario de Estados Unidos- antes de finales de 2025.

Unos 6.700 millones ya han sido introducidas, según Kellie Fiala, experta de la CBF. La población "evoluciona en una dirección positiva", añade.

"Cuando pensamos en el número de ostras que había en la bahía, todavía nos queda camino por recorrer", subraya sin embargo.

Una de las principales dificultades es la falta de sustrato, de material duro que las ostras necesitan para crecer, ya que durante años las conchas se recogían para usarlas en la construcción de senderos.

"La gente no entendía la importancia de devolver las conchas al agua para que sirvieran de hogar a otras ostras", destaca Kellie Fiala.

Para resolver el problema, la CBF anima a los voluntarios a fabricar especies de iglús de hormigón para servir de hábitats artificiales submarinos.

Todas estas iniciativas fomentan la implicación de los habitantes de la zona, desde escolares hasta jubilados.

Con otros voluntarios, Kimberly Price acude a la sede de la CBF cerca de la bahía para dejarle cubos de moluscos, 7.500 según un recuento.

Luego, las ostras se cargan en un pequeño barco que el capitán, Dan Johannes, de 61 años, pilota hasta alcanzar un arrecife santuario. Allí, dos becarios vacían sin ceremonias una veintena de cubos por la borda. El proceso solo dura un minuto y la bahía alberga unos miles de ostras más, camino al objetivo.

G.Tsang--ThChM