

El expresidente Uribe niega el soborno de testigos en un histórico juicio en Colombia
El expresidente colombiano Álvaro Uribe negó este lunes los cargos de manipulación de testigos, soborno y fraude procesal durante su primera declaración en el juicio que enfrenta desde febrero, en un caso que se remonta a 2012.
El exmandatario de 72 años defendió su inocencia por más de nueve horas y se centró en recordar su carrera política. La Fiscalía lo acusa de sobornar a exparamilitares para testificar a su favor, por lo que puede enfrentar una pena de hasta ocho años de prisión.
"Nunca se me ha ocurrido buscar testigos para una cosa distinta a la de verificar sus testimonios", dijo Uribe. Aseguró que siempre veló por la "verdad" y negó haber sido promotor de grupos paramilitares, una sombra que se ha cernido sobre sus dos mandatos entre 2002 y 2010.
Este proceso, histórico por sentar por primera vez en el banquillo de los acusados a un expresidente en un juicio penal, comenzó en 2012.
Ese año, Uribe denunció al congresista de izquierda Iván Cepeda por "buscar testimonios falsos" para vincularlo con paramilitares en los años 90 y durante sus dos periodos presidenciales.
Pero la justicia no solo desestimó sus acusaciones, sino que en 2018 empezó a investigarlo por supuesta manipulación de testigos.
Tanto el exmandatario como su equipo de abogados, encabezado por Jaime Granados, han defendido que este proceso tiene "origen político".
El exparamilitar Juan Guillermo Monsalve señaló al político de derecha por supuestamente haber fundado junto a su hermano, Santiago Uribe, el Bloque Metro de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), a finales del siglo pasado.
El expresidente siempre ha negado esta acusación.
"¿Por qué guardó tanto silencio por tantos años?", dijo Uribe respecto al exparamilitar, a quien aseguró no conocer personalmente.
El exabogado de Uribe, Diego Cadena, enfrenta un juicio paralelo por conseguir testimonios de exparamilitares que negaran el presunto vínculo de Uribe con la creación del grupo paramilitar.
Se espera que la fase de presentación de pruebas de la defensa se extienda varios días, ya que el equipo legal del expresidente ha llamado a declarar como testigos a más de 70 personas.
El juicio avanza contra reloj porque tras cinco años sin veredicto puede prescribir el próximo 9 de octubre.
B.Clarke--ThChM